Vence la procrastinación

En los últimos años la procrastinación se ha vuelto un tema o fenómeno un tanto popular en nuestras vidas. Todos en algún momento nos ha ocurrido que posponemos alguna tarea importante por pereza o por que no tenemos las ganas de hacerla. Seguro te ha pasado que en tu mente llegas a decirte “lo hago mañana”, “ahorita lo hago” o “en un rato más me pongo a hacerlo” y optas por una actividad más fácil o que te resulta más placentera.

¿Por qué procrastinamos?  

Procrastinar forma parte de la condición humana. NO es un trastorno. Cuando tenemos que hacer una tarea que no es del todo agradable o es laboriosa, hay un dilema silencioso en nuestra mente. Por una parte, está el sistema límbico (encargado de las conductas placenteras) y por otro lado está la corteza prefrontal (la cual se dedica a la planeación).

Debes saber que la procrastinación va de menos a más y que estamos conscientes de que estamos haciendo algo que no es prioridad o que no está del todo bien. A sabiendas de esto, nos provoca sentimientos de culpabilidad o ansiedad ya que no podemos parar y empezar a hacer la tarea que se supone que deberíamos de estar desempeñando.

Las causas de la procrastinación pueden variar dependiendo de cada persona.

• Perfeccionismo- al querer que una tarea salga tal cual la imaginamos, nos puede provocar ansiedad que no quede del todo bien y aplazamos el iniciar a hacerla.
• Desconocimiento- al encontrarnos con una tarea compleja y no sabemos como iniciarla, pensamos que son casi imposibles de hacer y no estamos preparados para hacerla.
• Pereza- en algunas ocasiones simplemente no tenemos ganas o por que es mucho más divertido hacer otra actividad mucho más placentera. 

¿Cómo evitar procrastinar?

• Se consiente de tu situación

No resolverás el problema si lo ves como algo irrelevante, ya que el procrastinar te puede afectar a corto, mediano e incluso a largo plazo. Ten en cuenta que entre más procrastines, mayor será tu listado de cosas por hacer y el tiempo para hacerlas será menor.

• Planifica tus actividades un día antes

Es importante que solo pongas las actividades que son de real importancia o urgentes, evita la sobrecarga de actividades ya que esto puede fomentar aún más que procrastines. Una vez que hayas organizado tu horario y calendario, tu productividad será mucho más eficiente.

• Divide las tareas complejas en pasos pequeños 

Si tienes que desempeñar una actividad de complejidad alta, para evitar abrumarte, divide esa actividad en pequeños pasos para que así puedas ir desempeñándola poco a poco. Procura que en cada paso a desempeñar no rebases los 45 minutos.

• Apóyate en la matriz de Eisenhower la cual consiste en lo siguiente:

1. Si una tarea es urgente, hazla ya.
2. Si es urgente pero no es importante, delégala a otra persona.
3. En caso de tareas no urgentes, pero si importantes, planifícalas.
4. Si no es urgente ni importante, postérgala o elimínala.

• Emplea la cuenta regresiva

Antes de desempeñar una actividad o si estás empezando a procrastinar, establece un conteo regresivo mental para comenzar con la actividad que tienes que hacer. Por ejemplo: Si estás viendo un capitulo de una serie, establece el conteo “Voy a enviar los archivos del trabajo en 10 segundos: 10, 9, 8, 7, etc”. Con esto le darás tiempo a tu cerebro de anticiparse y programarlo para desempeñar algo mas relevante.

• Encuentra tu propio gatillador

No necesariamente tienes que luchar contra esa actividad que forzosamente tienes que realizar. ¿A que me refiero con encontrar tu gatillador?  Selecciona una actividad ANTES de hacer la actividad urgente. Por ejemplo: Antes de empezar tu día (o actividad) toma un café, date una ducha, toma un vaso de agua o un ligero tentempié que este sea el motor para que puedas ser más productivo.

• Enfoca y mejora tu contexto

Puede ser una obviedad, pero elige un lugar ideal para desempeñar una actividad el cual esté lo más libre de distractores para desempeñar esa actividad que tienes que hacer. Equipa tu ambiente con elementos que te motiven a hacer esa actividad. Por ejemplo: Si tienes que estudiar o hacer un mapa mental, utiliza plumones, colores o material que te motive “Voy a hacer mi mapa mental con mi nuevo plumón que compré que quiero probar”.

Es falso que la procrastinación nos beneficia en nuestra creatividad, por el contrario, nos afecta en productividad y no nos permite tener un rendimiento eficiente en todas nuestras actividades. Es elemental que entrenemos a nuestra mente a que evite la procrastinación para mejorar nuestra productividad e ir eligiendo que herramientas nos benefician a cada uno. 

Escrito por: Psic. Jordi Alejandro Rojas Zamudio